- El arzobispo preside en Carballo la Eucaristía con la que da comienzo, de manera oficial, el II Año de la Parroquia.
- Se cumplen 50 años de párroco en Carballo de José García Gondar y 25 de Xosé Pumar Gándara de servicio sacerdotal en esta Parroquia.
- Barrio bendijo una custodia, un reloj y una imagen de San Juan Bautista.
El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, presidió ayer domingo en Carballo la Eucaristía con la que da comienzo, de manera oficial, el II Año de la Parroquia, que bajo el lema ”50 anos abrindo portas, acollendo e construindo Igrexa”, organiza el Consejo pastoral parroquial.
El día 1 de agosto del 2.022 el párroco de Carballo José García Gondar cumplirá 50 años de párroco de Carballo y Xosé Pumar Gándara 25 años de servicio sacerdotal en esta Parroquia, motivo para la celebración de este Año parroquial, con el que se pretende dar gracias al Señor por todo el vivido durante estos 50 años y renovar la vida cristiana de las familias.
Concelebraron con monseñor Barrio, además del párroco José García Gondar y de Xosé Pumar Gándara, sacerdotes de la comarca y otros que han desempeñado su labor pastoral en esta parroquia en algún momento de estos 50 años.
En su homilía el arzobispo de Compostela, comenzó felicitando a Garcia Gondar por estos 50 años de vida sacerdotal en esta comunidad parroquial: “es un momento para renovar el carisma que Dios ha puesto en ti y que tiene que seguir revitalizándose a lo largo del tiempo que el Señor te conceda estar en esta comunidad”. En este sentido, añadió que es un día de acción de gracias y de súplica gozosa a Dios para que siga bendiciendo a esta Parroquia.
Monseñor Barrio aseguró que una parroquia tiene que tener una conciencia clara de que no se puede vivir la fe teóricamente, sino que se ha de vivir en la concreción de la vida de cada día: “En la Parroquia tenemos que estar muy atentos a la nueva realidad que nos toca vivir y tratar de darle respuesta desde la fe”.
D. Julián añadió que una Parroquia debe ser una comunidad de creyentes, que tiene que girar en torno a la Eucaristía: “Es el eje, ella es la raíz y el culmen de nuestra vida espiritual y en ella encontramos esas fuerzas que necesitamos para seguir peregrinando”.
Además, subrayó que la Parroquia tiene que ser una comunidad misionera, en salida, hacia los demás, “porque solo así podemos ver lo que necesitan los demás de nosotros y nosotros nos podemos dar cuenta de lo que necesitamos y recibimos de los demás”.
En este sentido, mons. Barrio afirmó que “este tiene que ser el hilo con el que tenemos que ir vertebrando ese tapiz tan hermoso de nuestras comunidades parroquiales: una parroquia con espíritu auténticamente misionero”.
D. Julián invitó a salir al encuentro a los demás y no esperar a que vengan, ya que uno crece cuando es capaz de ayudar de crecer a los demás. Y añadió que hay que “tratar de ofrecer a los demás con humildad aquello que nosotros hemos recibido”.
Terminó el arzobispo dando gracias a Dios por estos 50 años de la presencia y pertenencia de García Gondar a esta comunidad parroquial y recordando a los sacerdotes que han colaborado y están colaborando con él.
Antes de la bendición final, el arzobispo bendijo una nueva custodia que va a utilizar en la Adoración Eucarística, así como un reloj y una imagen de San Juan Bautista colocados en el atrio de la iglesia parroquial.
Posteriormente se proyectó un vídeo realizado por el Consejo pastoral en agradecimiento por estos 50 años, y el delegado de Medios de la Diócesis, Manuel Á. Blanco dio lectura a un texto poético escrito por él mismo en el que hizo un recorrido por la vida de García Gondar.
Finalmente, el párroco tuvo palabras de agradecimiento por todos estos años de servicio pastoral en Carballo: a Dios, a los obispos de la Diócesis, a los hermanos sacerdotes, a las Hijas de la Caridad, y a todos los feligreses y colaboradores que durante estos años ayudaron a construir la iglesia-edifico, pero también la Iglesia de “piedras vivas”.
José García Gondar destacó que es un año “para mirar al pasado y recordar con gozo y gratitud tantas cosas como llevamos hechas entre todos con la gracia del Señor. Vivir el presente para hacer revisión, coger nuevo ánimo evangelizador, y renovar la fe, y abrir de nuevo las puertas de la Parroquia a todos, especialmente a los que llevan tiempo sin venir. Y una mirada al futuro: para conseguir que nuestra Parroquia sea una auténtica Comunidad evangelizadora y misionera”.
Terminó García Gondar con el deseo de seguir sirviendo a la Iglesia en Carballo: “Mientras el Señor me siga dando salud, y el arzobispo lo considere oportuno, mi deseo es seguir sirviendo y viviendo en esta querida Parroquia de Carballo”.
Galería de imágenes de la celebración
Revista oficial “II Año de la Parroquia”
Vídeo-Homenaje por los 50 años