- Una veintena larga de sacerdotes tomaron parte ayer en el funeral previo al entierro en Val do Dubra
A los pies de su ataúd, una placa en la que se leía: «Grazas, don Xesús Antelo». Muchos le han dedicado estos días cálidos mensajes de despedida. Acogió ayer el templo de San Pedro de Cances el funeral por Xesús Antelo Quintáns. Una veintena de sacerdotes tomaron parte en los oficios, a cuyo término, y en la intimidad, se le daría el último adiós en el cementerio parroquial de Rial, en su municipio natal, Val do Dubra. Antelo Quintáns, fallecido el viernes a los 83 años de edad, era párroco de Cances desde hace 57. También se encargó, durante mucho tiempo, de Oza, Razo y Bértoa. Antes había pasado un tiempo en Verdes, municipio coristanqués. Formaba parte de la unidad pastoral de Carballo.
Fuente: La Voz de Galicia