Un año más, como viene siendo costumbre, cada 3 de febrero, los feligreses de Carballo honraron a San Blas asistiendo a la Eucaristía y a la tradicional bendición del pan. En la iglesia parroquial San Xoán Bautista el párroco José García Gondar celebró la Eucaristía a las 20:00hs.
Patrón de las enfermedades de la garganta. San Blas fue médico y obispo de Sebaste, Armenia. Hizo vida eremítica en una cueva del Monte Argeus. San Blas era conocido por su don de curación milagrosa. Salvó la vida de un niño que se ahogaba al trabársele en la garganta una espina de pescado. Este es el origen de la costumbre de bendecir las gargantas el día de su fiesta. Cuando la persecución contra los cristianos llegó a Sebaste, sus cazadores fueron a buscar animales para los juegos de la arena en el bosque de Argeus y encontraron muchos de ellos esperando fuera de la cueva de San Blas. Allí encontraron a San Blas en oración y lo arrestaron. En la prisión, San Blas sanó a algunos prisioneros.
