- BELENES VIVIENTES EN LA COSTA DA MORTE | Carballo o Vimianzo, epicentro de estas escenificaciones. En Cee bendijeron el sábado una nueva talla del niño Jesús
Los belenes vivientes se han convertido ya en uno de los reclamos del día de Navidad en la Costa da Morte. En la parroquia San Vicenzo de Vimianzo lograron implicar a algo más de medio centenar de pequeños actores, y el resultado se vio después de la misa de 12.30 en la iglesia de la capital de Soneira. Lo integraron en una obra navideña, con representaciones asimismo en Cambeda, Calo o Castrelo también. Risas, trabajo de tiempo y mucho mensaje, como el que le imprimió el sacerdote José García Gondar, párroco de Carballo, a su felicitación navideña.
Eligió la carpa de Cáritas, a modo de «pesebre», y la postal navideña elaborada por esta oenegé para desear desde todo su equipo «una Feliz Navidad vivida en vuestros hogares». Agradeció el apoyo y colaboración de tantos, lo que permite ayudar a 200 familias, y dijo claro: «Esta es la buena noticia: la generosidad del pueblo de Carballo». García Gondar también tiró de comprensión para, ante la puerta de Cáritas forzada en su día para llevarse alimentos, advertir: «No hace falta forzar las cerraduras. Esta parroquia se caracteriza por acoger, por abrir puertas. Estamos 24 horas disponibles, los siete días, para acoger. No hace falta romper puertas». Desde la capilla de Belén llamó asimismo a «abrir el corazón».