El coristanqués Francisco Suárez Calvo, director de Cáritas Interparroquial de Bergantiños, fue ayer el pregonero de la Semana Santa de Carballo. Unos minutos antes de su intervención, explicaba que, obviamente, charlaría sobre la Semana Santa, de la que hizo un pequeño repaso cronológico.
También dejó un hueco, por supuesto, para Cáritas, «porque este é un tempo propio para acordarse da necesidade que hai no mundo, que é moita». No es el primer pregón de Suárez Calvo, que por más que resida en Coristanco, tiene un fuerte vínculo con Carballo. Cursó el bachillerato en la antigua Leus, los últimos 25 años de su carrera profesional como docente transcurrieron en la capital de Bergantiños… «Coristanco e Carballo tampouco distan tanto», bromeaba ayer. En su tierra natal, por cierto, ya fue pregonero, pero de una cita bien distinta: la Festa da Pataca, hace unos tres años.
Algunos más (13, seguro) lleva al frente de Cáritas Interparroquial de Bergantiños, donde no falta el trabajo porque la necesidad no cesa y son muchos los frentes donde tienen que ayudar. Suárez Calvo animó a la gente a participar, a colaborar, y tuvo un recuerdo especial para los voluntarios, sin los cuales muchas cosas no podrían hacerse. Son necesarios para numerosos proyectos. «A xente cada vez vólcase máis, porque ve a necesidade que hai ou porque tamén pode ter medo de caer nela, ninguén está libre», recordaba antes de su pregón, en el que trató de ser breve y ameno. Pese a que ya tiene experiencia en dos, considera que este tipo de actos siempre imponen algo, por más que uno vaya curtido en ciertas cosas. «Pero tamén é verdade que poucas veces se presentan ocasións así na vida», valoró el pregonero. Ahora, la Semana Santa carballesa ya está en marcha.
Fuente: La Voz de Galicia